La lumbalgia es también conocida como “dolor de baja espalda” o “low back pain” en inglés. Se describe como: “Un síndrome doloroso localizado en la región lumbar con irradiación eventual a la región glútea, las caderas o la parte distal del abdomen.”
Es una lesión muy extendida en la mayoría de los países industrializados. Por ejemplo, en Estados Unidos, un cuarto de la población ya ha sufrido de lumbalgia en los últimos 6 meses y el 70% de la población estadounidense a lo largo de su vida adulta desarrollará dolor lumbar. Estiman en más de 50.000 millones de dólares el coste total del tratamiento de la lumbalgia y de acuerdo con la Arthritis Foundation, el 40% de las visitas a los neurocirujanos y ortopedas se debe a esta causa. Las causas del dolor crónico de lumbalgia no han sido claramente identificadas, el enfoque se centra en los factores de riesgo para la aparición y cronización de esta patología.
En este artículo explicaremos de manera resumida los tipos de lumbalgia, sus factores de riesgo, y de qué manera el entrenamiento nos ayuda a evitar o rehabilitar este tipo de lesión.
tipos de lumbalgia
Se pueden distinguir dos tipos de lumbalgia:
- Algunas de las causas de la lumbalgia mecánica pueden ser: Escoliosis, artrosis, hernias discales…
- Algunas de las causas de las lumbalgias no mecánicas: Espondilitis, aneurismas y otras causas inflamatorias.
factores de riesgo
La lumbalgia puede ser provocada por diversos factores, explicados de una manera sencilla en la siguiente imagen, entre los cuales se encuentran el estrés, las malas posturas o los traumatismos.
¿Ejercicio físico como forma de rehabilitación?
Una vez explicada por encima la lumbalgia y sus tipos , debemos llevarlo a un terreno más práctico.
¿De qué manera podemos evitar o rehabilitar este tipo de lesión?:
En primer lugar, si padecemos de dolor lumbar, debemos ponernos en contacto con un profesional médico y descartar otro tipo de causas.
A partir de ahí, se deberá llevar un trabajo de rehabilitación con el fisioterapeuta y cuando se considere que la lesión está en condiciones de ser intervenida por un readaptador físico, es donde se hará uso del entrenamiento como método rehabilitador.
¿Qué debe contener el programa de entrenamiento?
A la hora de seleccionar un programa de ejercicio para la lumbalgia, se deben tener en cuenta todos los grupos musculares implicados de manera global o local. También se deben realizar diferentes test al individuo para comprobar qué déficits musculares posee para poder trabajar sobre ellos.
De manera general estos son los grupos musculares implicados:
A partir de ahí seleccionaremos los ejercicios que trabajen los músculos mencionados, la mayoría, encargados de la sujeción de la pelvis y la columna lumbar o también llamado Core.
También debemos de tener en cuenta que por ejemplo, en corredores, a parte de la debilidad de los músculos del core, la lumbalgia puede venir influenciada por una mala técnica de carrera o una falta de flexibilidad. Por lo tanto, debemos de tener todo esto en consideración para la planificación del programa de entrenamiento y elegir la mejor combinación de las diversas actividades.
Una vez seleccionados los ejercicios llega la parte más difícil: ser constante, algo fundamental para fortalecer los músculos implicados y evitar estos dolores.
Si quieres conocer algunos ejercicios para el trabajo lumbar sólo tienes que hacer clik en la siguiente imagen y encontrarás un video con 7 ejercicios indispensables.