En estos días el tiempo invita a muchos a salir a practicar deporte. Con una primavera adelantada y temperaturas altas, la floración aumenta y con ella las alergias. Muchos se encuentran ya con estornudos, los ojos llorosos, los mocos y la irritación de las vías respiratorias.
En los años 80 la alergia al polen se concentraba en los meses de mayo, junio y julio. Sin embargo, la tendencia de los últimos 30 años a padecer inviernos cada vez más cálidos ha generado lo que los alergólogos llaman polinosis multiestacional y las alergias, cada vez más, comienzan en febrero debido a procesos de floración más tempranos.
Realmente las alergias son reacciones del organismo cuando entra en contacto con sustancias del exterior cómo puede ser el polen.
El 33% de la población se ve afectada por este tipo de enfermedades.
Algunas de las alergias más conocidas son:
Rinitis alérgica, asma, rinoconjuntivitis y alveolitis alérgica.
¿Significa que la alergia es un impedimento para realizar ejercicio al aire libre?
Al contrario, los pacientes con asma por ejemplo deben realizar ejercicio físico ya que mejora su capacidad aeróbica , los síntomas , la calidad de vida y la función pulmonar.
Si es verdad que para aquellos que sufren algún tipo de alergia, salir a hacer deporte durante ciertas fechas puede ser un auténtico calvario. Así que os compartimos estas recomendaciones que te ayudarán a paliar los rigores primaverales y seguir disfrutando del deporte al aire libre.
Identifica los síntomas
Las alergias llevan implícita una sintomatología concreta que , en este caso los corredores o personas que practiquen cualquier deporte al aire libre, deben conocer a la perfección para evitar males mayores. Nos referimos a síntomas como la conjuntivitis (picor y escozor en los ojos, lagrimeo e hinchazón), la rinitis (inflamación de la mucosa nasal o de la garganta, estornudos, mocos y picor) y el asma (estrechamiento de los bronquios, inflamación y dificultades para respirar). Estos serían los más claros y es fundamental identificarlos.
Cada tipo de planta produce diferentes tipos de alergógenos, pero ¿cual es el que te afecta a ti? Es recomendable acercarse a ver al alergólogo para que te haga un diagnóstico, te indique que medicación tomar y que tipo de entornos evitar a la hora de hacer deporte. Hoy en día, muchos médicos recomiendan empezar la medicación antes de que empiecen los síntomas una vez se acerque la temporada.
Elige bien los días
Por supuesto, antes de salir a practicar tu actividad deportiva es importante conocer la situación meteorológica que se te presentará ese día. Elige bien qué día sales a hacer deporte. Los días de viento y sol son los peores, porque las plantas han producido más polen y el viento lo transporta. En cambio, los momentos posteriores a un chaparrón son perfectos para un polínico porque la atmósfera queda limpia.
Elige bien las horas
Las primeras horas de la mañana (5 a 10 h) y las últimas de la tarde y noche (19 a 24 h), son las que suelen registrar mayores concentraciones de polen. Hay días en los que a lo mejor un repentino cambio de viento o la lluvia ayudan a limpiar el aire, pero en general, si practicas deporte entre las 11 y las 18 h, es bastante probable que sufras menos de alergias.
¿Sabías que el polen puede viajar hasta 600 kilómetros impulsado por el viento? Sin embargo, si hay mucha humedad o incluso niebla se frena y viaja poco. Por eso, uno de los mejores momentos para hacer deporte es después de llover o cuando hay niebla. En la web o app de eltiempo.es puedes consultar las concentraciones de polen en el ambiente. Es importante saber que lugares registran las concentraciones más altas.
Elige bien dónde
La ciudad, contrariamente a la creencia general, es un lugar peor por la contaminación y las partículas de diésel. Y es que en estos elementos existen unos componentes que pueden multiplicar por 27 la alergenicidad. Por lo tanto, debes evitar lugares cercanos a las autovías y a los centros industriales, donde la atmósfera es más caliente y se agudizan los síntomas.
También en campo abierto no hay edificios que frenen los granos de polen, y el alérgico queda expuesto. ¿Sabes un lugar perfecto para hacer deporte y que no te moleste la alergia? La playa. Junto al mar no hay polen y la humedad ambiental es beneficiosa. Esto hace que muchos equipos profesionales entrenen junto al mar en primavera. No obstante, no sufras…porque si haces caso a estas recomendaciones, no vas a tener problemas.
Hidrátate al máximo
Durante periodos de alergia, el cuerpo suele perder más líquido a través de lágrimas y secreción nasal. Lo pierdes también sudando, y por eso no vale con beber un par de litros al día sino por lo menos 3. Notarás la hidratación adicional a la hora de eliminar la mucosidad de manera más eficiente, a la vez que reduces la irritación de las vías respiratorias. Si no bebes tus mocosas se secan, más que una persona que no tenga ninguna patología. También tienes una solución muy buena: La que recomienda la OMS: cinco piezas de fruta al día y dos litros de agua.
Otro método para regenerar es aliviar la congestión nasal con soluciones de agua marina con ácido hialurónico para que pueda usarse de forma sostenida. El agua de mar es un estupendo regenerador natural.
La importancia de la respiración
Habrás visto a menudo deportistas con máscaras. Son muy utilizada por ciclistas y deben incorporar siempre filtros homologados y una válvula de exhalación. Siempre calienta adecuadamente antes de empezar tu actividad y respira por la nariz, porque es donde disponemos de un filtro natural verdaderamente efectivo. Veinte minutos de calentamiento son esenciales, siempre favoreciendo la respiración nasal.
Dúchate y lava tu ropa
Es la única forma que las alergias no te persigan. Quítate de encima los alérgenos impregnados a tu pelo y a la ropa, de otra forma te acompañarán donde vayas.
Todas estas recomendaciones no harán que desaparezca tu alergia, pero te ayudarán a reducir sus síntomas y que puedas seguir practicando deporte al aire libre. Incluso el padecer una enfermedad alérgica como el asma no debe representar una barrera para la práctica del deporte. Algunos atletas famosos y deportistas de élite sufren asma sin que esto les haya impedido practicar deporte de alta competición. No obstante, es importante llevar el control adecuado por tu médico y entrenador personal.