La presencia de asimetrías es uno de los aspectos que se intenta evitar en el contexto deportivo de cara a la prevención de las lesiones. Además, numerosos estudios han establecido una diferencia en ambos miembros entre el 10-15% como indicador de la presencia de asimetrías. Ningún cuerpo es 100% simétrico. La genética, la forma de caminar y las actividades deportivas durante la edad infantil y adolescentes son las causantes de las asimetrías musculares en el cuerpo humano. Tampoco contamos con las mismas dimensiones en las dos extremidades y, por ello, los niveles de fuerza tampoco son iguales.
Sin embargo existen estudios en los que se extrae que no existe un claro consenso acerca de que la existencia de asimetrías aumente las probabilidades de lesión. Debido a los resultados contradictorios encontrados se estima necesario un mayor cuerpo de investigación y la elaboración de estudios a largo plazo y/o experimentales. También se apunta como necesario aumentar el número de investigaciones en cada deporte de forma separada.
También en esta investigación se compara la asimetría del movimiento en las mujeres adultas que nunca habían sufrido una lesión relacionada por correr con aquellas con antecedentes de fracturas por estrés. Se encontró un grado similar de asimetría en ambos grupos, pero se descubrieron valores de mayor impacto en las piernas de las mujeres lesionadas, lo que sugiere que la magnitud del esfuerzo de impacto los pone en mayor riesgo, más que cualquier asimetría.
Así pues, en los estudios realizados a este respecto dentro de las ciencias del deporte, el papel de la simetría en el rendimiento de carrera no está claro. No parece que exista un claro consenso entre la existencia de asimetrías y el aumento en el riesgo de lesión.
No obstante, estimamos que no hay que dejar de lado el hecho de padecer estas asimetrías más por el grado y por las descompensaciones musculares que puedan provocar.
Evita los desequilibrios musculares
Lo que si tenemos que tener en mente es que si queremos mantener la salud de la musculatura y no crear esas descompensaciones que te lleven a una inoportuna lesión, te aconsejamos que utilices un método de entrenamiento que te permita eludir los mayores desequilibrios , ya que debes ser consciente que por naturaleza como hemos comentado nuestro cuerpo no es simétrico y tiende a producir desequilibrios tanto a nivel de fuerza como resistencia.
Haz de hacer hincapié en la calidad del entrenamiento que lleves a cabo más que los tipos de entrenamientos que realices; por ejemplo los corredores deben tomarse tiempo para mejorar su lado débil o asimétrico si esperan influir en el riesgo de lesiones y mejorar su rendimiento.
Cómo corregir descompensaciones musculares
Hay tres aspectos muy básicos sobre los que has de incidir a la hora de evitar desequilibrios musculares:
1. Compensa la fuerza de tus brazos
Habrás notado que tienes más fuerza con un brazo que con otro. Esto no es nada raro, ya que por naturaleza somos asimétricos, tanto a nivel de estructura como a nivel de fuerza. Las acciones de nuestra vida cotidiana nos hacen desarrollar mayor fuerza en un brazo que en otro.
Para ayudar a aumentar la simetría en los dos brazos, es conveniente realizar ejercicios unilaterales que permitan trabajar con el mismo peso y de manera individual un lado del cuerpo y el otro. Por ejemplo, una buena elección sería sustituir en el press de banca la barra por mancuernas, incluso podrás beneficiarte si trabajas de manera unilateral un lado del cuerpo y posteriormente el otro.
2. Equilibrio en tu columna vertebral
Las descompensaciones más comunes son las provocadas por pequeñas desviaciones que puede sufrir la columna que pueden crean desequilibrios en la musculatura que compensa el trabajo de fijación de nuestra columna, el tan conocido core.
Así, el trabajo de core o de peso libre, es la forma más adecuada de evitar estos desequilibrios obligando a trabajar los músculos estabilizadores de la columna, fortaleciéndolos y evitando los desajustes comentados.
3. Extremidades inferiores
En las extremidades inferiores también se crean desequilibrios, que si no se atienden y se intentan contrarrestar, provocarán lesiones importantes.
Sería interesante para compensar estos desequilibrios trabajar de manera individual cada pierna, dándole prioridad a la pierna no dominante, ya que es la que debe soportar mayor carga de trabajo para intentar llegar al nivel de la pierna contraria.
Lo cierto es que no podemos decir que una determinada asimetría te puede acarrear siempre una lesión, lo cierto es que te puede dar lugar a problemas en la mecánica de la marcha, y esto si puede traerte alguna lesión.
Si necesitas que te asesoremos acerca de alguna descompensación concreta que te hayas observado a la hora de entrenar, no dudes con contactarnos y te mostraremos cómo puedes solucionarlo.
Imágen: Freepick