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El atletismo es un deporte individual en el que el atleta se enfrenta solo a sus retos, pero, ¿Es el rendimiento de un atleta fruto exclusivamente de sí mismo?
Tres atletas profesionales del grupo de atletismo de fondo y medio fondo de Antonio Serrano, nos desvelan la importancia del cuerpo técnico y el grupo en su día a día, ofreciéndonos una visión desconocida de un deporte aparentemente “individual”.
Viendo a Irene, Marta y Mariajo sentadas a la mesa del salón de su pisito del C.A.R (Centro de Alto Rendimiento) en Madrid, parece que sean amigas de toda la vida. Basta un rápido vistazo para percatarse de la gran comodidad, naturalidad y sensación de complicidad que existe entre las tres. Se sienten en casa, en familia. Y es que el deporte de alto rendimiento une, y mucho.
Pese a los cuatro años de amistad que mantengo con ellas y los muchos rodajes de charlas y conversaciones que hemos tenido, sé que cuando hoy me siente a su lado volverán a sorprenderme y habrá mucho de lo que hablar.
Antes de comenzar, me gustaría presentaros a estas tres atletas profesionales que, no sólo son el futuro del atletismo español, sino tres grandísimas personas:
Irene Sánchez-Escribano Figueroa (1992): actual subcampeona de España absoluta de 3000m obstáculos (MMP: 9:53.65 en 3000 obstáculos y 4:24.63 en 1500m)
Marta Pérez Miguel (1993): actual campeona de España absoluta de 1500ml en pista al aire libre (MMP: 4:10.43 en 1500m y 2:04.98 en 800m)
Mariajo Pérez Moreno (1992): Actual campeona de España absoluta en 3000m obstáculos y subcampeona de España de 10000ml (MMP: 9:48.97 en 3.000 obstáculos y 33:43.21 en 10.000ml)
Irene y Marta se iniciaron en el atletismo con 9 años, mientras Mariajo ya llevaba 3 años calzándose las zapatillas. Las tres hacían atletismo en los clubes de sus ciudades y, como muchos otros niños, lo hacían por diversión. Transmite felicidad ver sus caras de alegría cuando les pregunto cuál era entonces su motivación para entrenar día a día. “¡La diversión!”, responden, “lo bien que nos lo pasábamos con los amigos entrenando y lo emocionante que era viajar a los campeonatos todos juntos”.
Como es lógico, la motivación por la que actualmente realizan atletismo ha evolucionado de lo social a lo personal, y, ahora, factores como la sensación de superarse a uno mismo, plasmar en la competición la progresión y el gran esfuerzo realizados y , poco a poco ir consiguiendo objetivos cada vez más comprometedores, son las razones más fuertes.
No podemos comenzar sin hacerles la GRAN pregunta: ¿Qué es lo mejor y lo peor de ser atleta de élite?
Aunque cada una lo expresa a su manera, las tres coinciden. Lo peor sin duda reside en el sacrificio social al que estas tres deportistas se enfrentan día a día. Lo peor se encuentra en la repetitiva respuesta de “no puedo” ante cualquier proposición de plan procedente de familiares, amigos, novio, etc. ”No puedo” porque tengo que descansar, porque tengo que entrenar, porque tengo que cuidarme en la comida, porque no tengo tiempo…en definitiva, “no puedo”. Y ese “no puedo” se resume en un distanciamiento inevitable de todos los círculos externos al atletismo, lo que puede llevar a una situación de “incomprensión”, ya que no siempre es fácil de entender y aceptar ni por parte de los atletas ni por parte de las personas que les rodean. Esta situación lleva a los deportistas a desarrollar lazos de unión muy fuertes entre ellos, como es el caso de nuestras invitadas. Además, las tres atletas destacan que el atletismo es un deporte muy físico y constante que rara vez te permite desconectar y comenzar de cero.
Pero, ¡Centrémonos en la parte positiva! El realizar un deporte individual de manera profesional permite conocerse a uno mismo de una forma especial, imposible de alcanzar de otra manera. Trabajar constantemente al límite lleva implícito un conocimiento profundo del propio cuerpo, así como el desarrollo de capacidades físicas y mentales específicas y la vivencia de sensaciones únicas.
Una vez conocidas las razones por las que nuestras protagonistas practican su deporte y la mejor y la peor parte de su profesión, es el momento de descubrir si el atletismo es realmente un deporte tan individual como parece.
Puede resultar curiosa la necesidad de las atletas de diferenciar entre apoyo sentimental y apoyo profesional cuando les pregunto quién es su mayor soporte. Cuando hablamos del ámbito sentimental, las tres hacen referencia a su familia y pareja, sin embargo, cuando de apoyo profesional se trata, la respuesta es unánime: “Las personas que entrenan conmigo, que se encuentran en la misma situación deportiva que yo y que comprenden los sentimientos a los que me enfrento día a día”. En su caso estas personas son ellas mismas, su entrenador Antonio Serrano y, en algún caso, sus parejas.
Las tres deportistas consideran que su grupo de entrenamiento supone un apoyo fundamental en su entrenamiento diario y en su rendimiento. Destacan los siguientes aspectos positivos del entrenamiento en grupo:
– Mejora el rendimiento al favorecerse la competitividad. Ayuda a sacar lo mejor de cada uno y a superar sus límites.
-Favorece el mantenimiento de una rutina y genera compromiso.
-Incrementa la motivación al compartir tu pasión con otras personas. Minimiza la pereza y supone una vía de escape cuando es necesario.
La única desventaja que presentan es la posibilidad de que se desarrolle en el grupo un concepto de competitividad erróneo y mal enfocado que pueda deteriorar el buen ambiente.
Enlazando con el tema de la competitividad, nos revelan su caso. Irene y Mariajo son adversarias directas en competición y ambas se juegan la medalla de oro a nivel nacional en 3000m obstáculos. Estas dos atletas comparten la misma pasión, además de grupo de entrenamiento, piso y una gran amistad. Cualquiera pensaría que esta situación es insostenible, sin embargo ambas consideran que entrenar con su adversario directo cuenta con grandes ventajas: “te ayuda a sacar el máximo rendimiento al desarrollar la competitividad en cada entrenamiento”, además, “tienes siempre un punto de referencia de cómo está la otra atleta, lo que te permite ajustar, medirte a ti misma y mejorar”.
Las características más importantes que un grupo de entrenamiento ideal debería cumplir según las atletas, son los siguientes: sacrificio, compromiso, alegría, buen ambiente y, por último, respeto; ya que es un deporte individual que se entrena en conjunto en el que el respeto es indispensable.
Cuando les pregunto por las personas que les ayudan día a día a mejorar su rendimiento, aparece, en primer lugar, su entrenador Antonio Serrano (en el que confían al 100%), seguido de su fisioterapeuta Jose Antonio Bodoque (sin el cual admiten que sería complicado entrenar siempre a tan alto nivel) y, en el caso de Marta, cobra mucha importancia su psicólogo deportivo Pablo del Río (quien le ayuda a enfocar la competición adecuadamente).
Y como no podía faltar ¡Terminamos con la pregunta de oro! ¿Qué ocurre con el entrenamiento invisible? ¿Qué importancia tienen el descanso, la nutrición, el entrenamiento, la motivación y los tratamientos complementarios en el rendimiento de nuestras tres atletas? Les cuesta mucho escoger cuál de los factores anteriores tiene mayor peso, ya que consideran que a nivel profesional es un todo o nada. Cabe destacar que las atletas dedican más tiempo a descansar y asimilar los duros entrenamientos que a entrenar, hecho que ha de servir como ejemplo a aquellos deportistas populares que no le dan al descanso la importancia necesaria y que siguen creyendo en el “todo suma” en vez de en el “menos es más”.
Como bien han expresado nuestras invitadas, el atletismo es un deporte individual que se entrena en conjunto y en el que el grupo de entrenamiento y el cuerpo técnico son esenciales y asumen su parte de responsabilidad en el rendimiento final del atleta.
Nos despedimos deseando a Marta, Irene y Mariajo lo mejor en su carrera deportiva y que continúen disfrutando tanto de su deporte.
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